Estudiante de Licenciatura en Periodismo y Comunicación Social UNLP.
En el Giussepe Meazza, Roma sumó tres puntos vitales para afianzarse como único escolta de Juventus.
Inter de Milán llegaba al encuentro tras dos victorias consecutivas, y contaba además con la reaparición de su capitán y goleador, Mauro Icardi, quien había sido expulsado una después del partido en la derrota 1-0 ante Juventus. Además, en el banco de suplentes esperaban más argentinos: Juan Pablo Carrizo, Cristian Ansaldi, Ever Banega y Rodrigo Palacio. Por el lado de Roma, los de Luciano Spalletti venían de avanzar en la Europa League, y contaron con Federico Fazio como titular; Leandro Paredes y Diego Perotti esta vez esperaron e ingresaron desde el banco de suplentes.
A los pocos minutos de iniciado el encuentro, fue el belga Radja Nainggolan quien abrió el marcador con un golazo desde afuera del área. El volante ofensivo de Roma volvería a convertir por la misma vía en la segunda mitad, tras recorrer varios metros sin oposición y colgarla en un ángulo.
Inter mandó todo su arsenal ofensivo a la cancha: ingresaron los brasileños Eder y Gabriel, además de Ever Banega. A falta de diez minutos para el cierre del encuentro, el capitán Mauro Icardi le dio esperanza al Neroazzurro tras empujar un centro de Iván Perisic y poner el 1-2.
No obstante, una falta al bosnio Edin Dzeko -goleador de la Serie A junto a Gonzalo Higuaín, con 19 tantos- le permitió a Diego Perotti liquidar el encuentro desde los doce pasos, en lo que fue su 7° grito en el torneo.
Tanto Icardi como Perotti llevan varios meses en buen nivel, y Edgardo Bauza admitió seguirlos a ambos de cara a una posible convocatoria para la Selección Argentina. Icardi, el caso de más controversia, acumula 16 gritos y 8 asistencias en 24 partidos disputados.
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