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Casi una década para ganar en Quito

Universidad Católica cayó en condición de local ante Fluminense por 1-2 en la segunda fase de vuelta por la presente edición de la Copa Sudamericana.

El fútbol de los camaratas sorprendió desde el arranque, de hecho producto de la presión llegó el primer tanto del partido por cortesía de Jhon Jairo Cifuente, actual goleador del certamen con cinco anotaciones. Anteriormente en la fase inicial le marcó cuatro tantos a Petrolero Yacuiba, tres de los mismos en el Olímpico Atahualpa. La contención tuvo muchos errores al igual que el sistema defensivo, algo que pasó factura ya que en el primer tiempo llegó la igualdad a través Henrique Dourado, el cual anotó su cuarto gol en esta competencia, recordando que uno fue a Liverpool en la primera fase y dos en la ida ante el conjunto de la capital ecuatoriana.

En el segundo tiempo el estilo de ambos equipos no cambió, mucho más orden en la visita que finalmente anotó el segundo gol por intermedio de Marlon Freitas. Un gol que vale oro para la confianza del equipo de Rio de Janeiro que buscará en esta ocasión llegar lo más lejos posible en esta Copa donde antes ya disputó la final, precisamente ante Liga de Quito y misma que perdió.

Queda para el dato que es la primera vez que Fluminense consigue los tres puntos en suelo ecuatoriano, mientras que en términos generales es la segunda derrota de un equipo ecuatoriano en casa ante un brasileño por Copa Sudamericana. La última vez fue en el año 2012, ocasión en la cual Gremio de Porto Alegre se llevó los tres puntos de Guayaquil cuando visitó a Barcelona (0-1).

Universidad Católica se despide de este modo de su cuarta participación consecutiva en este torneo, marcamos además que es la segunda derrota en casa para los camaratas, antes en 2016 cayó por la mínima ante el DIM de Colombia. Ya veremos si la era de Gustavo Díaz se presenta una quinta clasificación a Copa Sudamericana, al mismo tiempo la atención del Ecuador estará puesta en el rendimiento de Jefferson Orejuela, baluarte de la Selección nacional y además la recuperación del aclamado Junior Sornoza, diez del plantel brasileño que por hoy puede decir que tras una década se llevó su primera victoria en la ciudad ‘maldita’.