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La reaparición del Panadero: "Sé que me van a perdonar"
8 meses luego del incidente más escandaloso en un Superclásico, Adrián Napolitano reapareció para brindarle una entrevista al periodista Gustavo Grabia del Diario Olé, donde cree que algún día podrá volver a la cancha: “Mi historia con Boca no puede terminar así”.
Luego de aquel 14 de mayo, los días de Napolitano parecen haber vuelto a la normalidad. Sigue al frente de sus panaderías, puede caminar por las calles del barrio sin recibir insultos, afirma que va al cine, a bares, y no pasa nada. Cuenta con tristeza el sufrimiento de ver al Xeneixe solo por televisión: "Llega el domingo y me quiero morir, porque todos mis amigos van a la cancha y yo tengo que verlo por tele. Al principio no podía, ponía la tele de fondo y relojeaba un poco mientras jugaba con mi hija".
Pese a todo, el Panadero es consiente del antes y después de lo que significó el episodio del gas pimienta, la suspensión del partido y luego la eliminación de Boca, con sanción incluida. "Estoy arrepentido, pero no puedo hacer nada para volver atrás. Sé que le hice un daño grande a Boca, y más allá de lo que diga la Justicia, yo ya estoy pagando porque me arruiné la vida".
Finalmente, sin justificar su accionar, trata de buscarle una vuelta y argumenta que sabía que Boca se iba a quedar afuera, y de local, y que se le ocurrió tirar el gas en base a su pasión, quizás sin límites. “Ustedes me trataron como a un delincuente, pero creo que hoy muchos hinchas se ponen en mi lugar y ven a un tipo que por una pasión desmedida hacia Boca tiró todo por la borda en un minuto.” Respecto a las repercusiones personales de esa noche, Napolitano comenta que los primeros meses fueron duros: “Me tuve que ir a vivir afuera, mi hija a veces venía llorando del colegio por lo que le decían los compañeros".
Como cierra de la nota a Grabia, el Panadero confía en que algún momento esto será por lo menos olvidado, y en el mejor de los casos perdonado, ya que piensa volver a la Bombonera. “Mi historia con Boca no puede terminar así. Quiero hablar con Angelici y explicarle que lo que hice no fue premeditado ni político para que revea mi expulsión. Sé que me van a perdonar y que algún día voy a volver a la cancha".
