COLUMNISTAS GOLEAMOS

David Morales

Periodista Deportivo

Las opiniones expresadas en este artículo son de absoluta responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la opinión de www.goleamos.com.
Fecha: 15 de Marzo de 2017

En 46 años cae un cuarto campeón

Barcelona inició la Copa Libertadores con un triunfo sobre el vigente campeón del certamen, nada más y nada menos que el Atlético Nacional en el estadio Monumental por 2-1.

Un compromiso en el cual Barcelona salió desde el vamos con una propuesta interesante, un mejor ataque por las bandas de parte de Pedro Pablo Velasco, Ely Esterilla, Mario Pineida y Marcos Caicedo por derecha e izquierda respectivamente. Además de un buen engranaje con Erick Castillo por el centro y efectivas habilitaciones para Jonathan Alvez. A pesar de todo lo mencionado el verdolaga puso la primera del encuentro tras una jugada en la cual John Mosquera ganó las espaldas al defensa y remató de manera efectiva.

El conjunto dirigido por Guillermo Almada no bajó los brazos y empezó ordenándose de mejor manera en el fondo y siendo más incisivo en la parte alta. Tras un tiro de esquina el uruguayo Jonathan Alvez se anticipó a la marca concretando el tanto del empate. Luego de unos minutos antes del término del primer episodio llegó el segundo gol tras un buen saque de Máximo Banguera, la ganancia del balón por parte de Esterilla y la asistencia para Marcos Caicedo que fusiló a Franco Armani.

En el segundo tiempo los colombianos ganaron terreno y de hecho estuvo cerca del empate en varias ocasiones, de hecho una acción no fue cobrada como penal por parte del árbitro chileno, hasta que finalmente el resultado fue favorable para los canarios. El equipo de Reinaldo Rueda es el cuarto campeón vigente que cae a siguiente edición ante los toreros. Antes en 1971 Barcelona venció 0-1 a Estudiantes de La Plata, en 1986 venció 1-0 al Argentinos Jr., luego en 1992 derrotó por 2-0 a Colo Colo y ahora al Atlético Nacional. Equipo con el cual se tomó la revancha de lo sucedido en el mismo Monumental en la edición 2015 cuando cayó por 1-2.

El equipo amarillo oriundo de Guayaquil tiene en su historia continental dos finales en la década de los noventa y aquello fue a base de ganarle a los grandes, sobre todo por hacer respetar la casa y sorprender a más de uno de visita. En esta edición será importante no achicarse porque los compañeros del grupo (Estudiantes y Botafogo) son de primer nivel. 



Barcelona impone su localía ante el campeón



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